Dualidad 101 217
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MensajeTema: 5    5                            EmptySáb Mar 24, 2012 9:38 am

El pozo

Despiertos los sentidos, no los sentimientos
Juego con mis cuchillas, juego con mi vida
Nadie apuesta, nadie se atreve a tal exposición
Destructores o constructores, nadie los dos en uno.

En mí hay un guerrero, y acaso en mí un buscador
Carente de guerras me doy pelea en cada entrenamiento
Desprovisto de objeto no dejo alfombra sin levantar
Ni cortina sin descubrir, ni hora alguna sin mí.

Aceptado el juego, la lucha y la inutilidad de todo
La invocación me tienta, algún pedido cosquillea mis labios
Dulce tentación seguida de la renuncia más amarga
Luego de la cual sigue el polvo, la hipertrofia y el cariño.

Al parecer, la libertad no se comparte
Aunque por ella se muera, o mueran miles
Por eso los esclavos, de todo tipo, color y mirada
Tienen tanto qué compartir, porque lo mucho es poco.

El gran Satán, sólo pudo, puede y podrá
Ir a dar un paseo, nada más, nada
Hará cosas, otras cosas no hará
Limitado al espacio, al tiempo, siempre limitado.

No hay más condena que la que cada cual dictamina
Nadie va tan lejos que no termine por volver
De algún modo, en acuerdo a su propio pentagrama
Entre silencios o nervioso abejeo de filosas corcheas.

El abrazo tan querido, el exceso tan sincero
Prometen sólo más ladrillos o más asfalto
Catedral o carretera, extensión física de lo conocido
Que sin desconocer su centro no lo alcanza, no lo llena.

Siento el corazón como un pozo vacío
Pienso al sepulturero que podría llenarlo
Y es liviano, y es profundo, y es oscuro
Apto para litros de lágrimas, para gente, para todos los muertos.

No sé si mi negrura atrae la luz
Pero me visita, de cuando en vez
Una especie de tregua con confites
Conversación anónima acerca de nadie.

El pozo, lo ves?

Smarc
13:57
13.01.02



Derechos humanos

A ser cobarde
A ser inútil
A cantar bajito por las veredas
Y soñar con otra mujer

A ignorar la música
La historia y la Biblia
A esperar cualquier cosa
Y a no hacer nada mientras se espera.

A ser olvidados y a olvidar
Y a recordar mientras se almuerza
A escribir con la mirada
Y a reposar con el andar.

Al silencio y a la desesperanza
A morir y odiar vivir
A enfermarse y no curarse más
A mudar de amor y de nombre.

A no reclamar sus propios derechos
A no tener ningún solo secreto
A ser sordo e idiota
A no querer a los búhos.

A no llevar pelo
A no usar los husos horarios
A no pintar ni expresar
A estrujarse el propio corazón.

A no hablar
A dormir poco
A dejar de vivir
Donde sea y cuando sea.

A ver que los otros viven
A recorrer los hospitales
A dormirse en los actos
A aburrirse y no decirlo.

A leer los horóscopos
A no saber qué hacer
A no poder hacer
Y a no querer hacer.

Y, finalmente, desde hoy
Todos se ganan
El supremo derecho
De prescindir de los demás.

Andrea
12.01.02
14:46


Peligro

Son fríos los cuchillos, parecidos a mí
Entibiados sólo por la sangre ajena
Por la carne que se organiza geométricamente
Siguiendo las disposiciones de una mano ciega.

Defraudación, las expectativas nada altas
Pero erradas, equivocadas, desquiciadas
Como un ciego que toca la sombra
Como un sordo que lee la tapa de un disco.

El musgo trepa junto a su propia humedad
Invadiendo el muro que alguna vez fue tórrido
En el que mi espalda reposaba su desesperación
Con todos los gestos perdidos fuera del pánico.

Quietud y lasitud, un desierto en la garganta
Con el imposible rebaño ocultando cada hembra
Lleno de esa niebla que visita el mar de madrugada
Corroído hasta el alma por la lista de interpretaciones.

Nos tuvimos frente a frente, todos nos tuvimos así
Y aunque alguien diga que no nos vimos, lo hicimos
Es solo que cada cual actuó de acuerdo a lo que vio
Y cada cual vio lo que era, y por eso huyó o permaneció.

Si soy lo que dices que soy, lo dices tú
Culpable no sólo es quien acomete
También lo es quien permite lo que sucede
Y el que lo sabe no reclama, lo expone, al final
Cuando el culpable se entrega, y la culpa desiste.

Vanidades mías, el equipo que se sueña
La piel que conoce el cuero distendido
Y el grito más alto que escapa a la luz
Que hace vuelo con el primer águila y la primera mujer.

Entre cocodrilos que han aprendido el cariño
Se apaga el día para huir de la sórdida sonoridad
Llamean las alas de los ángeles cubiertos de sí
Y un puño de vértigo golpea sobre mi posible nombre.

Será que alguien habrá de reír, será
El contrapunto marca su propia distancia
Y una melodía fácil brota de unos labios falsos
El veneno desliza su peligro en la multitud ajena.

Smarc
23:52
13.01.02


Fragua

El viejo que llevaba alimento en la bolsa
Que llegaba a principio del verano
Cada año más gastado, cada año más sonriente
Cada vez más próximo a dejar de existir.

Era dulce el fruto, era suficiente la satisfacción
No existe el futuro cuando el presente alcanza
Y no hay espacio para los condenados a más
Para los que no creen en lo que sienten no puede ser.

Oh Viv, qué ha sido de Tom?

Empezabas lo que yo iba conociendo
Tú por cosas que te sucedieron
Yo por cosas que no me sucedieron
Distinto origen para un idéntico final?

Imposible el amor del gato al gorrión
Imposible necesitar sólo a alguien
Aunque sea duro, penoso y vano
Un algo más hace que el sediento rechace el agua.

El papa es mujer
El rock es angelical
El canto gregoriano satánico
A la papa le llaman pasta.

Infierno detestable, el orden de los sentidos
La explicación de los grados de una fraternidad
La renegación del neófito que siento pero no cree
La caída, al fin, sin estruendo, con un silencio atronador.

Del alma del que no tiene cerebro
Hablamos todo el tiempo
Nosotros que sí lo tenemos
Hablamos siempre de lo que no sabemos.

Testosterona y estrógeno
Como explicación lúdica
A íncubos y súcubos
Andrógina imbecilidad asexuada.

No es para ti la alfarería
Sino la fragua y el golpe
La constancia abundante
Que reboza y gotea sobre la carencia.

Andrea
15:40
12.01.02


Puede

Mujeres de negro se apartan, se van
Toman la llanura, y luego la pendiente
Se esconden del cielo para hacer música
Veo sólo sus espaldas, pero parecen reír con los ojos.

Las cuerdas de sus instrumentos, lo sé
Están hechas de mis nervios extendidos
Vibra el acero cubierto de brea
Esos sonidos, inaudibles, duelen como clavos.

Hay también, una grave percusión
Es mi corazón que hacen latir a sobresaltos
A ratos funeral, a ratos carnaval
Y ahora la hoguera, y ahora la fantasía.

Sueñan, por debajo del mar, mientras sudan
Y sus hombres les cocinan un oscuro caldo
Hecho de papel mojado y ojos con cataratas
Al tiempo que sujetan a sus hijos por algún madero agusanado.

Pequeñas fibras de aluminio se arrastran por sí solas
A lo largo de todas las baldosas pulidas y sin alfombra
Y todo queda registrado en los nuevos cuadros
Pintados con grasa humana y sangre de cerdos.

Hace tiempo que las cabras no pudieron soportarlo más
Todas tropezaron para romperse la risueña quijada
Y así lograron no poder comer más la inmunda hierba
Sobre la que mujeres ancianas violaban a jóvenes mancebos.

Los fantasmas, aturdidos, superado el pánico y con terror
Abandonaron los castillos, que con sus torres elevadas
Parecieron clamar al tiempo por un perdón imposible
Y como no obtuvieran respuesta, se hundieron solos en el fango.

Desde entonces cada periódico acompañó su diaria edición
Con una muestra de semen y la imagen de un seno de anciana
Para que los que quedasen comprendieran más claramente
El porqué de los fetos arrojados bajo el puente de los pobres.

Afortunadamente, una parte del racismo fue abolida
Por acabarse los blancos, y también los negros, de golpe
Todos fueron moteados, víctimas de una varicela unificadora
Que terminó por simplificar la difícil industria de la moda.

Y así fue como imaginaron la independencia
Hasta concebir la realización de una república
Y eligieron a un presidente para esa su república
Y con resentido desprecio olvidaron al pobre papa de los locos.

Puede que por esto,
Espaldas, ojos
Bajo el mar
Música.

Smarc
14.01.02
19:33

El juicio

No era el tiempo, era la edad.

Andrea
13:38
13.01.02


Al costado

Mi alma, ahora convertida en sangre
Por no caer prisionera se deja escapar
Por la piel de los leprosos del siglo pasado
Soberana de las heridas de muerte.

Absorbiéndola, asumo el humo de tu confusión
Sin necesidad de ninguna respuesta detallada
Sin los detalles de alguna posible explicación
Desde tu carne misma en los lechos compartidos.

También la desesperada fiebre sólo en las manos solas
Y la calma fingida detrás del vidrio de algún vaso
Sobre el necesario mantel pulcro como los ojos
De un cadáver hundido en el fango por tres días.

El agobio del reloj incrustado en tus acciones
Arropando el miedo que te reclama la infancia
Que ya fue mucha, que ya es sólo postergación
Pretendida pero falsa de la visión de tus días.

Drama mundano, un tratar liviano, lleno de excusas
Con toda sombrilla para protegerte de toda luz
Cediéndole sin querer, pero sabiéndolo bien
La victoria a la grisácea capa que envuelve tus pasos.

Ni escándalo, ni caída, ni siquiera una huida mortal
Sólo repeticiones que no llegan a habituarse a sí mismas
Y que cada noche, cuando cierras los párpados a las luciérnagas
Te llaman por el nombre que habrías podido merecer alguna vez.

Mi corazón, convertido en lluvia de lava y nieve
Cayendo, se deja expandir sobre desconocidos desiertos
Soltando y anudando hilos en múltiples direcciones y sentidos
Aclarándose finamente, mimetizándose en una invisible soledad.

Habría también un asilo para los sanos
Para los destrozados por la realidad
Para todos aquellos infelices que lo son
Por beber del caldo de la infelicidad ajena.

Como sea, hasta el pasto tiene su altura
Y alguna célula, en el mar, su profundidad
Sin vileza, es cierto, la llanura, lo plano
Al costado de lo posible, y de lo ocurrido.

Al costado de todo, al costado de la nada.

Smarc
21:08
15.01.02


Atravesar

Protégete de las tres dimensiones físicas
Asume la conflagración más cotidiana
La derecha, la izquierda y el arriba
Comienza a desconfiar de los hechos.

Todo camino puede ser una sierpe
Que se vuelve a sí misma ciegamente
Volviendo al caminante algo menos que rata
Carne simple para la digestión trascendental.

No abras tanto los ojos, no hay tanto miedo
Alguien va escribiendo tu vida, en otro lugar
No hay escape, no hay posibilidades, probabilidades
Esas sombras que crees móviles, en verdad se mueven.

Lo cierto, cierto es, por algunos momentos
Imposibilidad de queja, odio diluido
Aprietan los gusanos, aquellos cuyos nombres
Conocemos, como el de las cuatro estaciones.

Quieres dormir, volver a casa, terminar la historia
No basta el cansancio cuando se está en la mira
Es empuje y estire, tempestad, lluvia ácida
El centro está tomado, queda no desplazarlo, quedas.

Entrégate al verano, sin embargo, despreocupadamente
Bébete un par de copas, y mira tranquilo el pasado
Observa, lo que ha sido fue hecho como se pudo
Sin la última gota, sólo con las primeras, las olvidables.

También hay premio en la estadía, una detención
Algunas veces el espejo deja de ser tan sincero
Y aunque las promesas dejen de pronunciarse
No hay falta ni culpa en lo que no habrá de ser.

Serena mañana desde el estanque nunca profanado
Sin mariposas ni aves visibles, solo hierva clara
Con las sombras postergadas y el café presente
Y esa sensación de haber dormido lo justo.

Se parte y se llega, algo así es el viaje
Aunque de pronto pareciera ser posible
Atravesar un página, o un pensamiento lejano
Y desplegarlo despacio ante una memoria tuya.

Andrea
23:24
13.01.02


El resto

La luna calla mi destierro
Interrogada por las estrellas
Finge ocuparse en el mar
Disimula incluso saberme.

En mí, le sigo el juego
Ambos somos sinceros
Evitamos las palabras
Y nos quedamos más cerca.

Pero por ella, por su pena
Incluso el sol sólo entibia
Haciendo más breve el amanecer
Y más largos los crepúsculos.

En otro tiempo se diría
Cada cual con su planeta
Y en la terrena amistad
Se manifestaría lo solidario.

Sin embargo, cuando se vuelve cierto
El compartir, antes que lo septentrional
Lo meridional de las horas también sinceras
El agua no alcanza a lavar, ni el fuego a purificar.

El espacio, que siempre se debe al tiempo
Se resiente de sí mismo, por a su vez sentirlo
Y cree que en parte es causa, en parte culpable
Y el alrededor entero pierde algo de su brillo constante.

Y entonces, ella y yo, sabiendo es como seguimos
Sin confiar en nada más que en la posibilidad
Como el que tocando piensa que puede no hacerlo
Con la fuerza del que viviendo en agua, en aire vive después.

Aprieta, como una prensa un libro recién encuadernado
Pero no alcanza a fijar en un punto las palabras, y lo que dijeron
Quien menos, intenta aliviar como puede tal presión
Lo dejamos hacer, qué pueden los hechos contra el vacío?

Sin antorchas, recorriendo el límite de la esperanza
Seguimos, convencidos de que el otro piensa lo mismo
Ya sin siquiera poder imaginarnos alguna forma, lanzados
Como el trapecista que se arroja con los ojos vendados, siempre.

Smarc
16.01.02
20:21

Canto futuro

A quién le expondrías tamaña desesperación
Que te lleva a cerrar las ventanas durante el día
A desconectar todos los teléfonos y a no abrir nunca
La puerta a nadie, ni aún en primavera?

Cómo justificarías tus años de encierro
Tras un ideal que ni siquiera puedes definir
Pero que te consume privándote de la vejez
Endureciendo tu rostro como un mármol antiguo?

No critiques la solemnidad de tus palabras solas
No te importe el fuego de la oculta festividad
Que ya llevas dentro y que nadie podrá apagar
Y ve ya respondiendo como tu corazón te lo exige.

Recuerda la calma que sobreviene al agotamiento
Opta por la serenidad de la tarea exigente
Mira que aunque en cualquier momento todo acaba
Puede que se de un instante más, y ahí debes estar.

No te demores en la presión que no venga de arriba
No todos serán aptos para la comprensión que cura
La naturaleza duele por su propia dependencia
Y sólo sana cuando obedece venciéndose a sí misma.

Vestido por dentro para cosas que son más
Asume lo que no alcanza a dar la talla
Para eso vienes construyendo el pecho de roca
Y la agilidad en la muñeca, resiste y luego desgaja.

Aunque no baste, aunque esto ahora ya no baste
Permítete el recuerdo del tiempo de esclavitud
Para que otros puedan pensar en que alguna vez
También podrán tener un pasado al cual sonreírle.

Cuántas mechas aún sin encender, cuántas!
Acaso alguien se encendería con sólo lágrimas
Una lista de quejas y otra de cosas a pedir?
En silencio, mientras todavía conserves lo primario.

Antes de caer, la tarde todavía se eleva un poco más
Y parece entonces perderse, extraviar su caída
Y así se enlaza, fundiéndose en lo que viene
Y por ello de sí misma no sufre, aunque otros sufran por ella.

Después, también tú cantarás.

Andrea
19:04
14.01.02


Todos los días

Creyó, a lo amplio de su edad, recorriendo sus emociones
En algunas definiciones, y muchas explicaciones
Se lanzó a vivir sin demasiadas previsiones, porque era fuerte
Hasta que cayó, se le doblaron las rodillas, se rompieron.

Sin poder andar, comprendió el tiempo, no el movimiento
Con su mente, trabajosamente, junto los restos de su corazón
Con fatigosa disciplina los fue uniendo, volviendo a componer
Tocando, por vez segunda, una de las aristas de la fe.

Es cierto que pidió, y es cierto que se le concedió
Y también es cierto que después pagó por lo recibido
Entendió entonces el precio, lo que le habían vendido
Y descubrió el valor de no ser ni convertir a nadie en objeto.

Tiempo después, con las piernas mucho más fuertes
Se ahondaba donde antes apenas lograba estimar
Con más carga encima, menos ansiedad y en verdad
Con mayor tristeza, pues iba pagando por lo que recibiría.

Se atrevió por fin a mirar hacia otros planos
Con algo de audacia, y algún roce de respeto
Y aunque no fue claro lo que vio, fue suficiente
Para captar en silencio su propia estatura.

Asumió su vida como parte de la vida
Y que la misma, con todas sus horas
Teniendo que ver con todo, no era todo
Y al fin logró cazar la humildad más pura.

Desde entonces su fe no le crea dependencia
Y su libertad no le priva de la compensación ganada
Como el punzón que corta el hielo, sin juzgarlo
Así se abre paso entre lo cotidiano del pasado ajeno.

Sabe que puede volver a caer, pero ya no pedirá
No hay tiempo para la queja, ha quedado atrás
Y hacia atrás no se vuelve, aunque recuerde
Porque el adelante es lo que cuenta para la vida.

Hay algo más, que incluyendo el cuerpo, lo supera
Como la alegría que emerge sobre el mar de dolor
Y ocurre todos los días, cuando con valor se acepta
Que es verdad, que es cierto, que tiene sentido.

Como llegar a casa, y que la puerta esté abierta.

Smarc
20:16
18.01.02


El letargo

No bastaría un sólo trifolio para anunciar
O al menos indicar la honda posibilidad
Del fin del suave letargo de púas venenosas
Que ya intuyen en sus sueños su propio despertar.

Firme en su estructura la chambrana soporta
Con gracioso estoicismo el peso del escriba
Que va y viene, entre sus símbolos meridianos
Preso por una nueva aptitud pasible de ampliación.

Por la noche navega el cárabo que los trae
Por la vela o por el remo, un minuto asesina a otro
Mi fe sonríe con el mentón apretado al pecho
En la memoria de sentimientos que se quebraron
Como leños secos destinados a una nueva hoguera.

El niño, ya abyecto por la leche primera, calla
Traga el tiempo de su miseria propagada
En silencio va bordando la bandera de su condena
A mitad de lo rural, incapacitado para el campo puro.

En su escarcela la adolescente lleva un escapulario
Escondiendo con una materia otra, de la mirada fugaz
De los que incapaces para obedecer la suprema orden
De dominar la naturaleza, tientan a robar lo ajeno a sus manos.

Con el húmero roto, y vuelto a encallecer, más duro
Como muestra del pago del abajo por la búsqueda de cima
El desconocido poeta teje a oscuras el confuso epitalamio
Con vocablos recién descubiertos al borde de la fragua
Que honrarán la ceremonia entre un fin y otro principio.

Y en Asunción, con las puertas de la pudibundez destrozadas
Los enfermos de pica se relamen entre desechos de hospitales
Masticando apresuradamente, mientras bailan el presente aborrecible
De aquellos que basaron su fortaleza en algún hombre o una mujer.

Compasión y crueldad para que el que busca en grimorios
La alteración del ánimo de aquel ignorante que busca consuelo
En tan sólo conocer desde el extraño su pasado fugaz
Cerrando entre ellos el nefasto círculo de toda debilidad.

Sin que nunca haya empezado se les acaba el descanso
Lo largo de la espera señala cuánto peso guarda el fin
Por entre el hielo y el fuego, ya la mirada va divisando
La atronadora respuesta a la fidelidad más alta.

Andrea
20:10
15.01.02


Real idea - Realidad

No es extraño, y es cierto, tampoco lamentable
Que ciertos puros intentasen una conspiración
En la cual, ahora lo veo, difícilmente yo crea
Porque necesitaron del ayer para proyectar el mañana.

Hay una distancia, que cuando sucede y se hace visible
No todos pueden explicarla, aunque todos puedan captarla
Que se refleja en cada gesto, palabra, y escrita expresión
Entre el que busca mejorar lo perfectible, y el que busca lo mejor.

Entre los altos se detecta la enfermedad, que pudiera ser una prueba
Entre los más altos, buscar la cura se convierte en meta, superarla
Pero, sin bondad o maldad, mensaje puro, también existen
Los que idean en silencio la posible realidad de la no enfermedad.

Existe el riesgo, inherente a todo lo que pudiera ser evolución
De caer, volver, o repetir, entonces, el idéntico punto de fracaso
Por el cual, y ante el cual, otros entes, sin quererlo, pero admitiéndolo
Erraron la forma, aunque no el sentido, y así, cedieron la posta
Sin tener que hacerlo .

Son ciertas las fuerzas que se tejen bajo y sobre tierra
Y admirable la sutileza del silencio en que se mueven
Tanto, que despierta la ternura respecto de aquellos
Que percibiéndolas, osan estudiarlas hasta hallar sus leyes.

Ellos también, presos del intento, de gran espalda para el pasado
Se agazapan con una actitud que supera su aptitud
Pero están, a fuerza de fe y carencia, por encima del rebozo
De los que pudiendo no se animaron a exponerse al riesgo de lo más.

Príncipes, principio, alegría detonante del río que ríe
Pequeño estanque de agua constante, que alivia la sed de uno
Un uno que abrevará, por ser capaz de hacerlo
La sed de más de uno, que al alcance del manantial, no lo alcanza.

Más lejos y más arriba la posible hostería de los menos
Que hoy, entre teclas, frecuencias, y estadísticas
Todavía entre los cuatro brazos de la cruz secreta y pública
Callan, ensordecedora y atronadoramente callan, lo que saben
Que sintiéndolo, no lo explican, porque habiendo transitado el camino
Lo señalan, no lo explican.

Smarc
16:50
19.01.02


Casi el último trecho difícil

No cesa el entusiasmo, se mantiene, corazón
Es la ansiedad la que ha abandonado el bote
Porque ella ocupa un espacio muy amplio
Necesita acaparar los suspiros, toda la atención.

Ya sé, mi embarcación es pequeña, pero es ágil
En ella tampoco caben la angustia o la desesperación
Apenas hay espacio para la energía que requiere
Mover los remos, fijando la mirada en la única compañía.

Cuando las olas se exaltan un poco, queriendo entrar
No se despierta el miedo por el roce del agua
Ni cuando amenaza la tormenta, ni cuando se desata
El miedo aguarda del otro lado de la orilla, para cuando lleguemos.

Sólo tienes que seguir, nada más que eso
Y si el bote se vuelca, habremos de nadar
Y si nos ahogamos, por habernos cansado
Solo moriremos, y lo volveremos a intentar.

Al menos, corazón, no será el libro el que se equivoque
Seremos nosotros, sin posibilidad de arrepentimiento
El espíritu por fin liberado de su letra
La paz que ya comienza a adornar la felicidad intuida.

Así que sigue, que entre los dos bueno se torna el viaje
Aquí, donde nos basta la dirección, y creer en ella
Sin gaviotas, ni delfines, ni nada que tanto divierte
A quienes sólo son capaces de marchar para volver.

Además, ya estamos cerca, corazón, partimos temprano
Éramos tan jóvenes cuando lo hicimos
Que parece locura que todavía lo sigamos siendo
Mientras que los ancianos que dejamos, lo son aún más.

De manera que disfruta, que todavía es posible
La eternidad misma podría estar mañana
Y no te aflijas más por la carencia de aquellas manifestaciones
Que tanto tiempo estuvieron, y que tuvieron que dejarnos.

Recuerda que aprendimos que el ahora no es tan breve
De manera que ahora, no me falles, corazón
Puedo imaginar lo que sucedería si cedieras
Incluso sé que podría soportarlo, pero mira
Acaso no sería bello llegar por fin a la otra orilla?

No lo crees?

Andrea
18.01.02
20:43


Será

Quedó rota la promesa de fiesta
Al taumaturgo le fallaron las palabras
Y aunque cada cual, por no poder acercarse al profeta
Intentó con sus medios, olvidarlo, a él y a su presión, no se pudo.

Sin embargo, ya la música no sería la de antes
Después de haberlo intentado, penosamente queda
La realidad de unos sonidos que de cierto no fulgieron
Y la de los otros, los nuevos, que apenas pueden ser entendidos.

Se ofrece el drama, todavía inacabado
Del que ha salido de su tierra primaria
No porque haya salido de la misma
Sino porque ha visto otra, diferente, quizás mejor.

Entonces, ya no tiene sentido el comercio de las flores
Ni la preocupación del fósforo de la tierra unida a los cadáveres
Las voces, hace tiempo pareciendo necesarias, al menos justas
Aquellas que parecían representar al cariño, se vuelven viscosa humedad.

Resistencia, rojo dolor del fragor bañando los ojos
Con el cuerpo adaptado de un sólo golpe
A la posibilidad de relajación sólo en las azoteas
De los edificios en donde ya nada habita, ni siquiera la espera.

Si vieras este espectáculo, si lo vivieras
Entenderías el significado de la paciente virtud
Y ya no hablarías, presa sencilla del llanto
Tú que todavía ignoras quién eres.

En la mañana, donde fuera antes la morada
De aquella loca mujer de tantos amantes
No hay más color que el gris, y alguna impresión de estática
El viento desgarra, y las que quedan llevan mantos de luto.

Tiembla la tierra, las visiones se suceden, de costado
El cuello, con la idéntica blandura de un pedazo de roca
Persiste en su apuesta, evitando fijarse en los caídos
Sin negar, como hasta ahora, sólo asintiendo, sin juzgar.

Después serán los pasos del que se aleja
Cansado de derrotar a tanta tentación
De ceder a la desesperación y a la desesperanza
Lleno de fuego que ya no lo quema,

Será.

Smarc
21.01.02
20:12


Detengo

Me miro, me detengo, distingo el abismo
Detrás de mí habita un alma ansiosa
El tiempo es el mismo, cronológicamente
Para el que tiene y para el que carece.

Más tarde o más temprano, cronológicamente
El carente se hará apto para llenar su vacío
Cuando ya dominadas las artes del esclavo
Adquiera el valor para poder tomar la fuerza.

Más allá de la justicia, la propia naturaleza impredecible
Fuera de la ley de la termodinámica, de toda ley
La posibilidad de una chispa que salida de la hoguera
Se ignora por completo qué dirección tomará, ni si saldrá.

Me detengo, me miro.

Mi cuerpo toma su indiscutible posición
Se gana un espacio, generando y desplazando energía
La espalda un poco curva, o bien erguida
Drama sencillo de hacer posible o doblarse o quebrarse.

No por comodidad, sino por una menor contrariedad
Me mantengo erguido, conociendo exactamente el riesgo
Asumiendo la extenuante y larga posibilidad del dolor
Porque no le temo, dolor y sufrimiento, sé, difieren.

Sin embargo, cedo a la confesión de la calma
A aproximadamente ochocientos mil años de Lemuria
Insertados todos sobre una vasta estantería de leño
Que inexpresivos soportan el peso del conocimiento.

El novel atleta que sale disparado, apenas con una meta
Siente una liviana lástima por el rengo que no lo mira
Pero el rengo, anciano por ello desde su misma infancia
Se duele, no por la carrera, sino por que esa carrera pudiera no existir.

Entretanto, los dedos y el cerebro todavía se comunican
Simbolizan y significan las manos, cada parte del cuerpo
Cada color, y cada temperatura existen, ya aprendidos
Como la extroversión del satén, y la introversión del algodón.

Texturas sónicas, fonética española, de cara a los moros
Estar en la reconquista, saboreando lo que dejaron los conquistadores
Granada, ganada, y vuelta a ganar, Fernando, el muchacho
Que a su modo fue fiel, como un juguete al niño que lo posee.

Andrea
16:21
19.01.02


La niña

A Valen

El calor extrañó a la llama
La llama perdió su luz
Y en la oscuridad, así de vuelta
Descubrí que no estabas cerca.

Primero te sentí, y luego te pensé
No me importa Descartes,
Él no te conocía, no te sabía, ni como yo
Vivió dos vidas, una contigo, la otra sin ti.

A ti no te olvido
De ti no prescindo
Sin incluirte, no te excluyo, se da que
Mi libertad termina con tu imagen.

En la mañana, cuando toda la ciudad
Todavía dormía, y tú despertabas
No sabía cómo serías, no sabía
Que en la siesta, bajo el sol, un rayo me distinguiría.

Ya vivimos el principio, que no olvidó la tempestad
Envuelta entre colores, músicas y algo de historias
Entre los dos, aprendices, sin sabernos mirarnos todavía
Comenzamos el cariño, el puente más difícil.

Yo, sin más normas que las mías
Tu, sin otras que las ajenas
Yo, mirando un camino que no podría recorrer
Tu, transitando suave sobre los espinos que no oculté.

Conocí la nueva clave del dolor más extremo
Que no viene de la duda, ni de la carencia de certezas
Que nace en tu llanto, en tu inocente dolor
Que para mí es sufrimiento, que sólo por ti sabré explicar.

Grandeza del hombre convertido en rey
Más allá del dorado y del azul más intenso
Sin púrpura, la pureza, casi imposible, pero real
Del beso más sincero, del que siente la vida por rozar tu piel.

Ignoro si te merezco, de si habré de hacerlo, alguna vez
Lo que sé no es mucho, que sin ti, sería otro
Un alguien que intenta cosas, que hace cosas
Y no este ser, que por el tuyo, alcanzó a entender el cielo.

21.01.02

Smarc


Nuevo

En su cuerpo, que era pelo y era vulva
Había aliento, hambre y sed
Humana, me recordaba lo Divino
Entonces gratitud, que sonríe, ajena de lamento.

La quena, compañía difícil, pero compañía
Siempre dispuesta a partir, y a retener en su escape
Por sí llegaba a más de sí, usándose como escalera
Al termino de la cual, volvía a comenzar, en mí.

La naturaleza desplegaba el sexo
Y el sexo fijaba la naturaleza
Expansión limitada que más que ley, fue orden
Sobre el cual, unos pocos recordaron la espiral.

Nadar, espirar e inspirar, aire
Nadarse, inspirarse y expirarse, agua
Caminar, polvo y músculos, tierra
Caminarse, descubrir la chispa, fuego.

Entre una oreja y otra, atravesando el oído
El misterio fija los ojos dispuestos al final
Guerra será la última distracción, humana
Cuando presentimiento asuma la calma del después.

Ahora, develado lo existente bajo el sol
En su ritmo y en su sentido
El imposible, vuelto descripción asequible
Le muestra sus fauces y su veneno al explorador.

Difícil la sorpresa, incluso quizá imposible
La persistencia cobra su añeja importancia
Lucha del que por mucho tiempo fue lo mismo
Contra el que en un breve tiempo lo comprendió.

Señalar un error, es señalar la posibilidad del propio
Exponerlo es ir más allá de las armas
Cae la batalla cuando la justicia no tiene valor
Y entonces la Verdad, pudiera sonreír.

El infinito y lo finito
En un corazón
Que piensa
Con lo labios apretados.

Alguien lo vio.

Andrea
17.26
19.01.02


Pudieran ser las tuyas

La risa, que esquivando el escándalo
Navegaba impetuosa sobre la irreverencia
Se convirtió en el brillante río de lágrimas
Que sólo fueron lavadas por otras lágrimas.

Fue entonces la sucesión de los días
El almanaque que se hacía vida cotidiana
Y para cada día un nombre, una acción
Y así, fechas, destinos, horarios para la entrega.

Desde mí, todavía del otro lado de la orilla
Examiné el velero expuesto al fracaso
Le di señales, las encendí junto a las estrellas
Por si el barquero, algo oculto, se exponga al granizo.

En mí, hubo mezcla, por absorber nada desprendí
Y me alejé, todavía más, cuando alguien se acercó
Y aunque el pasado volvió, toco a la puerta y pasó
No pudo, no quiso, llegar hasta el fondo, hasta el sótano de mis sentimientos.

Temor y angustia, esas ganas, que siendo puras
Parecían no tener destinatario fijo
Como un asta firme en la cima de la montaña
A la que no le calza la bandera tanto tiempo guardada.

Extravío, búsqueda consecuente, negar la negación impuesta
Insistencia y persistencia, juego brutal para corazones firmes
Sobre el camino regado de piernas rotas, donde se pierde la fe
Y la entrega cambia su puesto por el abandono, y el desistimiento.

Entonces, donde nadie llega, porque es un lugar donde cada cual
Se expone y se abre, se adentra y buscándose halla el centro móvil
Con la sospecha del sacrificio que casi enloquece de soledad
Se asume el tiempo, la posibilidad de error, y una promesa de dicha.

No hay después, todo es ahora, muñecas sujetando las bridas
Se escucha el atrás, no es posible volverse a mirar
Demasiados obstáculos, salvado uno, se yergue el siguiente
Y como todo es posible, la tensión se viste, majestuosa, de imposible.

Hasta aquí.

***

El anciano, lo viste? Ni siquiera lo miraste
En él, quizá algún poeta romántico halló motivo de canto
Pero nunca fue ejemplo, su trayectoria fue insípida
Y lo cierto es que no cambió el mundo, esperó que alguien lo cambie.

Los niños murieron de hambre, luego de ser violados
Y entonces, tu estúpida memoria enciclopédica
Sirvió para el orgullo de tu estólida madre
Incapaz de engendrar algo distinto de sí misma.

Pide salud, bienestar, cosas así, ya que no sabes
Ya que ignoras, por completo, lo que es suplicar
Por morir de una vez, y terminar con la sed
De vivir rodeado por la traición de los intelectuales.

Te sugiero el suicidio, pronto y barato
A que sigas viviendo, con la eterna posibilidad
De que me encuentres a cualquier hora, con mi humor
Que es una sonrisa, dispuesta a darte un espejo a todo.

De todos modos, el rostro cansado, del que fue joven
El niño que todavía toma la mano de su padre
Y la madre que se llena de esperanza al mirar su ombligo
Le pueden más, mucho más, a la lectura de tu incierta vida.

Ya duerme, o vete lejos, dilúyete antes que alguien lo haga
Mira que ni siquiera te queda el equívoco, el error o el pecado
Ni orgullo ni humildad, ni vanidad ni lo pleno del vacío
Carne para el asador de la mediocridad, no insultes la vida con la tuya.

Hasta allá.

***

Un esfuerzo más, como quien no quiere
Frunce el ceño, mientras sonríes apretando los dientes
Mastica la bilis de un futuro posible
Sin lamentos, ni demora, obtén el blanco, la suma.

Si no tus hijos, los de los demás te miran, y no durará
No te mires, construye, no mires, cree
Mucho o poco, todo o nada, vacío o lleno
En tus manos parte del secreto que se llama posibilidad.

No está nadie, acaso crees que nadie lo sabe?

Es hora, la hora que el tiempo estaba esperando
Es la espera, el presentimiento, la fe hecha nombre
Dos manos son suficientes para el mundo, no para sostenerlo
Sino para elevarlo, y pudieran ser las tuyas.

22:25


Cuidado

Sangro, dentro mío sangro
Y sudo, fuera de mí sudo
La vida va por torrentes
La sal se expone expulsada.

La suavidad del mensaje se me va
Siento el vértigo, y también la fuerza
Como el que llega al nido de águilas
Y no encuentra más que cenizas de otra década.

A tiempo recuerdo, todo lo que sé
A tientas, inseguro, busco en la experiencia
Y falla, y entonces casi lo contrario, girar
Se enciende la mecha, se salva la llama, enciende.

Confusos proyectos, sonidos de abejas, herrumbre
Cosas insólitas sobre las cuales se eleva el grito
De un cuerpo presionado hasta el límite
Por su propia alma, por la posibilidad de su esencia.

Daño y placer, la perturbación del poder
A cada paso con el peso de hacer pasar el pesar
O abrir las corazas que evitan la exposición
De aquellos pechos que todavía a sí no se han aceptado.

Las sombras de los perros que no tuve me hacen compañía, cuando siento
Que ninguna guerra, ninguna, finalmente alcanza para destruir
La estrategia falla cuando por objetivo tiene algo nombrable
La cimitarra luce más en la noche, cuando su destinatario la ignora.

Cuidado, también yo ando por ahí, recorriendo el mundo
Escucho el reclamo de las postergaciones que decidí
Entiendo que más que la paga, más de uno exige recompensa
Pero cuidado, no fui yo quien anduvo buscando o pidiendo protección.

Mi hora no llega, va llegando
Nadie habrá de adelantarla, ni retrasarla
Se siente el paso de su advenimiento
Y ya un corazón siente frío, y otro, agitación.

Tranquila serenidad, locura de juventud
Nadie es dueño de lo que sueña
Ni de su deseo, si no lo conoce
Y matar, es sabido, es más sencillo que olvidar.

Y así, estar frente a mí
Es más sencillo que estar a mi lado
No es desde ahora que lo sé.

Andrea
21:00
21.01.02
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