No soy de prometer castillos esplendentes
de decir suavemente una mentira amable
ni de pedir a nadie lo que no puedo dar.
Tampoco voy de frente ni por ningún costado
pues simplemente voy al límite del tiempo.
Soy lo mismo que busco, una sed que no sacia
ni la entrega de un cuerpo carente de defectos
ni la exigencia férrea que impulsa mis acciones,
sino solo el encuentro de alguien que como yo
navegue sin cadenas de cara al infinito.
Sin con poco te basta, mejor toma distancia,
no por desprecio burdo que acaso te proyecte,
más bien porque es lo cierto que el que no va a por más
se convierte en el ancla que detiene al barquero
no por querer su bien, sino por sujetarlo.
Pero si lo que gustas se encuentra en lo imposible,
y si lo que deseas va más allá del mundo,
es conmigo que irás a tenerla más fácil
porque yo no me rindo al tener todo en contra
y en cambio me complazco en superar lo extremo.